CONSEJOS PARA PREVENIR EL CÁNCER DE PROSTATA

Estos son algunos consejos de salud que podrían ayudar a prevenir la enfermedad.

Usted puede ayudar a protegerse de la enfermedad siguiendo estas siete reglas:

Reduzca el consumo de carne: El cáncer de próstata - una enfermedad en base a hormonas - puede estar fuertemente relacionado con el consumo de carne que contiene altos niveles de químicos bloqueadores de hormonas. Trate de comer carne no más de tres veces a la semana. Lo mejor es comer carne blanca, y cortes magros de carne roja con partes iguales de pescado. 

No freír los alimentos: Las dietas que son altas en los productos lácteos - leche, queso, mantequilla y grasas saturadas de origen animal - también se asocian con una mayor incidencia de cáncer de próstata. Evite las grasas que se encuentran en la margarina, manteca vegetal y aceites vegetales procesados. Si usted tiene sobrepeso, comience una dieta para reducir el riesgo.

Coma más frutas: Coma de cinco a nueve porciones diarias de frutas y verduras frescas orgánicas. Coma bastantes ricas salsas de tomate rojo. Trate de incluir la soya en su dieta - la leche de soya, queso de soya o yogur de soya. Estos son todos ricos en antioxidantes, que protegen nuestras células contra los efectos dañinos de los radicales libres y ayuda a prevenir el cáncer.

Tome vitaminas: los suplementos diarios recomendados para la protección de próstata incluyen: Vitamina A, C, D y, selenio y aceite de linaza.

Deje de fumar: Dejar de fumar también protegerá sus niveles de zinc.

Ejercicio: Debido a que muy poca investigación se ha llevado a cabo en el cáncer de próstata, el poder de ejercicio, se sabe que es beneficioso en impulsar el sistema inmunológico del cuerpo, sigue siendo en gran medida incierto. Lo que los científicos sí saben es que el ejercicio puede prevenir el cáncer, ya que aumenta la inmunidad natural por la mejora de la circulación, presión arterial y la eficiencia y la fuerza del corazón.

También mejora las defensas antioxidantes de las células, que pueden ayudar a contrarrestar los efectos potencialmente nocivos de los oxidantes, y que puede llevar a las mutaciones genéticas que subyacen en el desarrollo de cánceres.